Arquitectos

El edificio se localiza en el Distrito de Arganzuela, muy cerca del centro de creación contemporánea “Matadero Madrid” y de uno de los principales parques urbanos de la ciudad “Madrid Río”, siendo esta una de las zonas con mayor auge de la ciudad. Se destaca por su carácter de barrio, pero con una mejora progresiva en las áreas de urbanismo, arquitectura y servicios. Cuenta con una excelente red de transporte público consolidada, al estar dentro del centro histórico de Madrid.

La firma de arquitectura Cano y Escario, inicia el proyecto con el reto de maximizar las posibilidades de una parcela entre medianeras de 12 metros de fachada para un programa de 17 viviendas distribuidas en 6 niveles y 2 plantas subterráneas de aparcamiento. El equipo ha profundizado en el análisis de espacios habitables contemporáneos para dar respuesta a las mejores condiciones de vida de sus residentes.
Cuenta con una diversidad de tipologías que resulta muy eficiente para cada una de las viviendas. Los modelos de apartamento van desde uno a dos niveles y desde los 56 m² a los 117 m² con áreas distintivas interiores, contando en todas ellas de espacios exteriores, excepto en los dúplex.

La fachada a la calle se manifiesta con la simplicidad de un solo material, SATE, que permite evitar puentes térmicos y obtener una alta eficiencia energética “Etiqueta A”. Se enriquece con la presencia de miradores y con balconadas construidas en acero. Con un carácter actual y dialéctico, la fachada queda integrada perfectamente con los edificios colindantes, característicos del barrio.

Al interior, las viviendas cuentan con un sistema domótico y con una instalación de aerotermia para agua caliente y sistema de suelo radiante calor/frio que permite un confort óptimo y un gran ahorro energético respecto las instalaciones tradicionales.

El proyecto aprovecha las áreas libres al máximo. Nada más acceder al edificio nos encontramos con un amplio soportal con jardineras, lámina de agua y aparcamiento de bicicletas/patinetes con instalación de recarga eléctrica. En esa misma planta baja, un patio jardín interior, con piscina y una zona de coworking de uso comunitario. Las zonas comunes se complementan con una gran zona de chill-out ajardinado en cubierta, complementado con zona de comer y solarium si así lo desean los futuros propietarios.

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